La falta de suministro de agua afecta a cientos de familias del barrio Monasterio, en Villa Elvira, La Plata. La situación se torna insostenible con temperaturas que superan los 35°C y sin respuestas concretas de la empresa ABSA.

La falta de agua es un problema que ya lleva tres meses afectando a los vecinos del barrio Monasterio, en Villa Elvira, La Plata. Desde principios de noviembre, cientos de familias enfrentan serias dificultades para acceder a un servicio básico que se ha vuelto cada vez más escaso.

Pablo, uno de los vecinos más afectados, relató a 0221.com.ar la penosa situación que atraviesa su familia: "Es insostenible la situación", dijo. "Al principio, algunas casas tenían más presión que otras, pero ahora no sale nada o la presión es tan baja que no llega al tanque". La falta de agua en su hogar ha obligado a su familia a buscar soluciones improvisadas. "Para bañarnos, todos los días tengo que llevar a mis dos hijos y mi esposa a la casa de mis padres. En casa, lavo los platos con una manguera y para tirar la cadena del inodoro debo cargar agua en baldes", detalló, visibilizando las dificultades diarias.

El calor extremo que azota la región, con temperaturas que rondan los 35°C, ha agravado aún más la situación. "El agua de la casa no funciona porque la presión es tan baja que no llega al tanque. Muchos vecinos compraron bombas o cisternas, pero no todos pueden afrontar este gasto extra", explicó Pablo. El sufrimiento se intensifica cuando, además, los usuarios siguen recibiendo facturas con aumentos cercanos al 100% del valor habitual. "Nos cobran un servicio que no nos brindan", expresó indignado.

La frustración con la empresa ABSA es palpable entre los vecinos. Andrés, otro residente de la zona, destacó la falta de respuestas claras tras varios reclamos. "Empezamos con este problema a principios de noviembre. Los operadores de ABSA nos dan respuestas distintas cada vez", señaló. La comunidad también se ha organizado para ayudarse mutuamente: "Los vecinos que tienen agua de red nos traen bidones. Tenemos que administrarlos muy bien para no quedarnos sin agua", contó Andrés.

La incertidumbre persiste, y aunque en los últimos días se observó personal trabajando en una bomba de agua, los vecinos siguen esperando soluciones efectivas. "Hace semanas que estamos así. El trabajo de ABSA nunca se ve reflejado en nuestras casas", denunció otro vecino.

El malestar generalizado es cada vez más intenso, y la demanda de respuestas no cesa. "Lo único que pedimos es tener acceso a algo tan básico como el agua", concluyó Pablo, quien, como tantos otros, no sabe hasta cuándo podrá seguir viviendo en estas condiciones.

Mientras tanto, la comunidad de Villa Elvira sigue esperando respuestas urgentes y concretas por parte de las autoridades y la empresa encargada del suministro de agua. El sufrimiento de los vecinos es claro: la falta de un recurso esencial como el agua está poniendo en riesgo la salud y el bienestar de toda la zona.