La política platense vuelve a sacudirse con fuerza: el presidente del Concejo Deliberante de La Plata, Marcello Galland, fue procesado por la Justicia Federal por apropiación indebida de recursos de la seguridad social durante su gestión al frente del Club Universitario, entidad que también preside desde 2014.

La resolución, firmada por el juez federal Ernesto Kreplak, sostiene que Galland retuvo los aportes patronales de los trabajadores del club sin acreditarlos al sistema previsional, una maniobra que dejó en evidencia un manejo más que cuestionable de los recursos. A pesar del procesamiento, el magistrado decidió no dictar prisión preventiva, aunque ratificó un embargo por 20 millones de pesos sobre los bienes personales de Galland.

El fallo judicial aclara que el dirigente fue sobreseído por el mismo delito entre junio y diciembre de 2019, período en el que el club estuvo administrado por un órgano fiduciario. Sin embargo, al haber estado al mando desde 2014, la responsabilidad recae sobre sus hombros por los años anteriores, cuando se registraron las omisiones.

En su defensa, el funcionario municipal alegó que "el club no tenía fondos ni para pagar sueldos", justificando así la retención indebida de aportes. “Se les pagaba a los empleados en cuotas, a medida que entraba dinero”, declaró, una confesión que, lejos de eximirlo, refuerza la gravedad del cuadro.

El escándalo estalla justo en medio de un año político caliente en la capital bonaerense, donde crecen los cuestionamientos sobre el doble rol de Galland como dirigente deportivo y figura clave del oficialismo local. ¿Afectará esto su continuidad en el Concejo Deliberante?

 La bomba ya estalló. La justicia habló. Ahora, la pelota está del lado de la política platense.