Una fuerte denuncia sacude al ambiente inmobiliario platense y pone en el ojo de la tormenta a la conocida martillera Romina Garrafa, quien, según fuentes judiciales consultadas por Diario Gran La Plata, estaría involucrada en una serie de maniobras irregulares con trabajadores de la construcción.

La acusación es grave: Garrafa habría contratado obreros para realizar diferentes obras en propiedades que maneja, y luego, al momento de pagar, simplemente desaparecía. “Se hace la desentendida, como perro que tiró la olla”, sostuvo una de las presuntas víctimas, quien afirma haber sido despedido sin recibir el pago correspondiente y que, además, le habrían retenido herramientas de trabajo.

“Nos deja colgados, no paga y encima trae otra cuadrilla para seguir la obra como si nada”, denunció uno de los damnificados, visiblemente indignado. “¿A qué costo construye esta mujer? ¿Al costo de cagar al que labura?”, cuestionó.

Pero esto no sería un caso aislado. Según trascendió, la situación ya fue formalmente denunciada ante la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N°1 del Departamento Judicial de La Plata, ubicada en calle 7 N°1150 entre 56 y 57, a cargo de la fiscal Ana Medina. El expediente quedó registrado bajo el número PP-06-00-038406-25/00.

El caso ha generado revuelo entre trabajadores del rubro y profesionales del ámbito inmobiliario, donde más de uno ya murmura que “no es la primera vez que se escuchan cosas raras” sobre el accionar de la martillera.

Mientras la investigación avanza, la imagen de Garrafa comienza a tambalear. El ambiente está caldeado y todo indica que este escándalo recién empieza.