Desde las 10 de la mañana de este viernes, cuando se habilitó la venta de entradas para el partido de ida entre Flamengo y Estudiantes por los cuartos de final de la Copa Libertadores, cientos de hinchas del Pincha se volcaron a la plataforma futebolcard.com con la intención de asegurarse su lugar en el Estadio Maracaná. Sin embargo, se encontraron con serios inconvenientes que generaron bronca, malestar y frustración generalizada.

Según numerosos testimonios recogidos por la redacción del portal  local 0221.com.ar, el sistema presentó fallas desde el primer momento. Al intentar vincular una tarjeta de crédito o débito para efectuar el pago, la web arroja errores constantes, señalando que la tarjeta es “errónea” o impidiendo avanzar al siguiente paso.

La situación no mejora al optar por Pix, el sistema de pagos instantáneos más popular de Brasil: la plataforma se queda trabada en el momento de generar el código QR, lo que impide completar la compra de las entradas. La misma problemática afecta también a los propios hinchas de Flamengo, que están teniendo dificultades similares para adquirir sus localidades, lo que evidencia un colapso general del sistema.

Detalles de la venta de entradas

• Cantidad disponible: 2.000 localidades para el sector visitante

• Precio: R$ 200,00 (Sector Sur B – Visitante)

• Inicio de venta: Viernes 12 de septiembre a las 10.00 (hora argentina)

• Plataforma de venta: futebolcard.com

Requisitos y pasos para la compra

1. Registrar la biometría facial en biometria.flamengo.com.br

2. Ingresar a futebolcard.com

3. Iniciar sesión con usuario y contraseña

4. Seleccionar el evento del partido

5. Hacer clic en "Comprar entradas"

6. Elegir el sector Sur B (máximo 3 entradas)

7. Completar los datos de cada titular: nombre, CPF/DNI y fecha de nacimiento

8. Confirmar la compra, aceptar los términos y realizar el pago

Mientras miles de hinchas esperan que el sistema se normalice, crece la preocupación por el corto plazo que hay para resolver esta situación, considerando que el partido se disputará en territorio brasileño en pocos días. Por ahora, el malestar sigue en aumento.