Estudiantes de La Plata se prepara para un mes decisivo en el Torneo Clausura 2025. El plantel dirigido por Eduardo Domínguez disfrutó de un fin de semana libre debido a las elecciones nacionales, pero ahora se concentra en el partido clave contra Boca Juniors que se jugará este domingo 2 de noviembre a las 16 horas en el estadio de 1 y 57. Este encuentro, correspondiente a la fecha 14 del Clausura, será fundamental para las aspiraciones del equipo en la lucha por un puesto en las copas internacionales 2026.
A pesar de que Estudiantes priorizó la Copa Libertadores en la presente temporada, la tabla anual muestra al equipo albirrojo en el puesto 12 con 38 puntos, fuera de la zona de clasificación a la Copa Sudamericana. Sin embargo, el equipo tiene aún 9 puntos por disputar en lo que queda del torneo. Los próximos rivales directos de Estudiantes incluyen a Boca Juniors, Tigre y Argentinos Juniors, dos de los cuales se enfrentará en casa, lo que aumenta las posibilidades de sumar puntos clave.
La reciente clasificación de Argentinos Juniors a la final de la Copa Argentina también alimenta las expectativas de Estudiantes. Si el equipo de La Paternal gana la final, liberará un cupo en la tabla anual, lo que podría permitir a Estudiantes avanzar un puesto y acercarse a la zona de clasificación a competiciones internacionales. Así, el cierre del torneo será decisivo para las aspiraciones del equipo de Domínguez.
Por su parte, Boca Juniors llegará al partido con bajas sensibles. Rodrigo Battaglia no estará disponible por una lesión muscular y, además, Leandro Paredes cumplirá una suspensión por acumulación de tarjetas amarillas, lo que deja al Xeneize sin dos piezas clave en el mediocampo. La idea del cuerpo técnico de Boca era que Paredes cumpliera la suspensión en La Plata para llegar limpio al Superclásico contra River Plate.
Estudiantes aprovechará los últimos días de descanso para recuperar energías y afinar detalles tácticos en su preparación para el duelo ante Boca. La victoria en el clásico contra Gimnasia ha dado un impulso anímico importante al equipo, que ahora tiene el objetivo claro de sumar la mayor cantidad de puntos posible para regresar a las competencias internacionales en 2026. El partido ante Boca se perfila como una prueba de fuego en este camino.